Va a suponer una locura en la economía, industria, en nuestros trabajos y negocios. Esta pandemia está a la altura de los grandes desastres que iluminan por encima de todo un siglo. Habrá un antes y un después de esta terrible plaga que parece revisar de primera mano un dramático y terrible diluvio universal. Pareciera el delirio de un loco proselitista bíblico que acarrea en su demencia el fin del mundo.
Menos mal que cuando solo tienes la soledad sola...aparece Internet que te conecta con el mundo. Pero la incomunicación deriva en locura y esta mañana una mujer se ha suicidado tirándose por la ventana. Yo ahí lo dejo.
