Ayer, viernes, día 25, la música de guitarra del Dúo Trastes y la rapsodia poética de Toño Blázquez brujulearon entre coches y ciclomotores de época en el Museo de Historia de Automoción de Salamanca, ofreciendo al público asistente que llenaba el aforo, un peculiar e inusual espectáculo.
Los artistas salmantinos consiguieron demostrar un notable poder de convocatoria cumpliéndose sobradamente el aforo de este singular Museo donde descansan valiosos ejemplos de la historia de la automoción españolas. Un aplauso, pues, a su dirección por programar este tipo de actos culturales porque van, no cabe duda, en beneficio de una mayor asistencia de público a conocer este espléndido museo salmantino.
No fue la acústica la mas adecuada pero el talento musical de Luis Fiz y Beni Frutos, así como la acertada elección del repertorio de conocidos temas para guitarra y la conmovedora voz de Toño Blázquez en los poemas de emotiva textura sentimental, compensaron las deficiencias sonoras.
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